sábado, 17 de junio de 2017

Porsche Ricardo Rodriguez


Aprovechando que este fin de semana se corren las 24 Hrs. de Le Mans edición en la que  han caído un par de records que llevaban años vigentes como el de velocidad, vamos a repasar la vida de alguien que aún posee uno, Ricardo Rodríguez de la Vega y que ya va por los 57 años de vigencia.

Ricardo era el hermano pequeño de Pedro Rodríguez, otro de los grandes pilotos que ha tenido Porsche en su historia y quizá mi piloto favorito junto a Al Holbert, por lo que un día de estos le tendré que dedicar una buena serie de entradas para mostrar sus maquetas y su historia,  pero esta vez repasaremos la de su hermano pequeño, Ricardo Rodríguez.






Ricardo nacio el 14 de febrero de 1942 en Ciudad de México, hijo de buena cuna, ya desde muy pequeñito y junto a su hermano Pedro dos años mayor que él demuestran una pasión y dotes por la velocidad fuera de lo normal, pilotando todo aquello que tuviera ruedas ya fueran bicicletas, motocicletas y por supuesto autos, Ricardo con 13 años se proclamó campeón de México de motociclismo en la categoría grande de 500 cc. Los dos juntos convencieron a su padre para que les apoyara en su carrera automovilistica.






El hermano mayor Pedro comenzó a correr con un Porsche 354 en 1954 con tan solo 14 años.






Y Ricardo emulaba a su hermano con un pequeño Fiat.






Y si su hermano Pedro se había iniciado a los mandos de un 356 Ricardito no se iba conformar con menos. El "carro" elegido por el mexicano para seguir los pasos de su hermano fue nada más y nada menos que un 550!. 

Su padre era buen amigo del Príncipe Alfonso de Hohenlohe, el aristócrata español era el representante de WW y Porsche para México, ciudad en la que residía en el exilio,  (Marbella llegaría unos años más tarde), y al encargarle el coche este se niega en primera a vendérselo al considerarlo una temeridad para la edad del joven Ricardo, pero tras verlo correr en una carrera con un Osca y quedar en tercera posición, no solo accede sino que hasta la llegada del coche le presta su propio 550 para que ya corriera de inmediato.






Su 550 chasis fue el chasis nº 117 y llego a México en mayo de 1957 estrenándolo de inmediato en una carrera celebrada en Puebla.






Logra un 3º puesto y en su siguiente carrera su primera victoria celebrada en Torreón. Su hermano Pedro ya competía en campeonatos internacionales y Ricardo quiere seguir sus pasos sin perder tiempo, su siguiente carrera ya es en Estados Unidos inaugurando un nuevo circuito de carreras que se había construido en California, Riverside.






Y esta es la maqueta que nos ocupa.






Pertenece al fabricante italiano Brumm con su molde del 550 usado hasta la saciedad, hay que recalcar que últimamente ha dado un pequeño salto de calidad  sobre todo a nivel de estampación en sus miniaturas, aunque sigue siendo su punto débil, en este caso en los últimos años está sacando nuevas versiones de sus moldes, en ediciones especiales con cajas conmemorativas como el caso que nos ocupa en homenaje al pequeño de los Rodríguez.




Aquí la podemos ver al detalle.

























En cuanto a la carrera, Ricardo haría la pole.






Salió el primero y llego el primero! 








Con el 550 ganaría entre 1957 y 1958 más de media docena de carreras y otros tantos podios a nivel internacional.













A mediados de 1958, su hermano Pedro participo en  las 24 Horas de Le Mans con un Ferrari y Ricardo se quiso apuntar a la "fiesta" y junto a toda la familia tomaron rumbo a Europa.





Pero Ricardo no fue admitido en la carrera al tener 16 años recién cumplidos y considerarlo no apto.






No desaprovecho la estancia en Europa y acudió a visitar la fábrica de su 550 junto a su madre.






Visita en la que acordará correr para la marca algunas pruebas con un 718.








Como esta en Riverside en 1959 en la que vemos a su hermano Pedro empujándolo hacia la salida.







En 1960 su hermano Pedro ficho por Ferrari y ese mismo año formaron pareja en las 12 Horas de Sebring.







Y ese mismo año ya sí que pudo correr las 24 Hrs. de Le Mans.






No junto a su hermano enrolado en el equipo oficial de los de Maranello pero se las apaño para conseguir una "vieja" cafetera.






Un par de años antes no le habían dejado correr, pero a la que lo dejaron correr Ricardo consiguió un segundo puesto, siendo el piloto más joven con 18 años en subirse al podio de Le Mans, record que aún sigue teniendo y que tiene pinta de ir para muy largo.









La maqueta está disponible realizada por Jolly Model.






Junto a su hermano y con las cafeteras rojas correrían bastantes carreras, como los 1000 km de París de 1961.





Que ganarían entre otras tantas.






Y se convirtieron en auténticos ídolos Mexicanos.









Ricardo lograría un 2º puesto en Sebring, un 3º en Daytona y otro 2º en los 1000 Km de Nurburgring,

Estos resultados no pasaron inadvertidos en Maranello y en el verano de 1961 Ferrari le invito a probar un Fórmula 1 en el circuito de Módena.






A la cuarta vuelta lo hicieron parar, había batido la vuelta rápida del circuito, don Enzo Ferrari lo hizo debutar de inmediato en el Gran Premio de Italia celebrado en Monza, Ferrari ya tenía tres coches oficiales y decidieron inscribir al "muleto" como cuarto coche para dárselo al joven Ricardo. El niño clasificó al F156 con el dorsal nº8 en 2ª posición por detrás de su compañero de Scuderia Wolfgang Von Trips.






Su hermano Pedro alucinaba, como todo el equipo.





Von Trips fallecería trágicamente en un accidente en las primeras vueltas de la carrera.





Ricardo abandonaría por un problema en la bomba de inyección, pero se convertiría en el piloto más joven en debutar en la Fórmula 1, record que mantuvo hasta el 2009 en que se lo arrebató nuestro Jaime Alguersuari.


La maqueta está disponible en un espectacular set de Brumm, con unos acabados mucho mejores que los habituales en sus Porsche (será que son italianos y la sangre tira para casa jajaja) con toda la Scuderia Ferrari del 61 al completo incluido el camión de transporte.

En un set precisamente dedicado al Gran Premio de Italia del 61 que ganó Phil Hill.





En 1962 ya formó parte de la Scuderia disputando el campeonato de Fórmula 1, en la 3ª prueba celebrada en Spa lograría un 4º puesto.





Siendo el piloto más joven en puntuar en la historia de la F1, record que mantuvo hasta el año 2000 en que Jenson Button se lo quito por apenas unos días.


En mayo acudió a la Targa Florio.






Pilotando un precioso Dino.






Y junto a Willy Mairesse y Olivier Gendebien ganó la Targa!.





La maqueta está disponible en Art Model.








Un pequeño video.






En 1962 se iba a celebrar por primera vez una prueba de Fórmula 1 en su México natal.






Pero esta no era puntuable para el campeonato del mundo por lo que no figuraba en el calendario para Ferrari, Ricardo no quería perderse la oportunidad de correr el Gran Premio de su país y pidió permiso a Enzo para poder correr con un Lotus de alquiler.






El 1 de noviembre durante la primera jornada de entrenamientos marca el mejor tiempo, a primera hora de la tarde, ya vestido de calle para asistir a una fiesta de bienvenida le comunican que John Surtees ha superado su tiempo y que ya habían modificado la carburación en el coche que Ricardo había pedido para la sesión clasificatoria del día siguiente, como aún quedaba media hora de entreno, Ricardo se vuelve a poner el mono y sale en busca de recuperar la pole provisional.





Esta instantánea esta tomada justo antes de volver a la pista en la que le besa la mano su padre don Pedro en presencia de su hermano pequeño.

Ricardo ya no volvio a boxes.









En la última curva peraltada de entrada a meta perdió el control estrellándose contra las vallas, se destrozó el abdomen contra el volante.






Y así con tan solo 20 años terminaba una de las carreras más prometedoras de la historia del automovilismo.









En una época en la que las carreras eran para hombres un niño sobresalía mucho, no sé qué hubiera pasado si la muerte no le hubiera llegado tan temprano, pero de lo que no tengo duda es que le habría tenido que dedicar más entradas que a Holbert, aunque supongo que con más coches rojos que alemanes, de los de Stuttgart ya dio cuenta su hermano mayor.






Pedro también fallecería ocho años más tarde.





Saludos.