viernes, 27 de marzo de 2020

Porsche Brumos. 7ª Parte


Y llegamos a los 80!




Ya sabéis que casi nada es nuevo en Porsche!






Los 935 imponen su tiranía en los circuitos de medio mundo, y en las carreteras, Porsche quiere que brillen sus motores delanteros.





Como bien sabéis, Porsche dejó de evolucionar a los 935 con el Moby Dick, para centrarse en otros proyectos como la Indy, y fueron sus "Corsarios" los encargados de mantener y mejorar a la "bestia" en las pistas, mientras en Europa fueron los Hermanos Kremer con sus versiones K, en Estados Unidos, Peter Gregg y el resto tiró por otra línea de evolución, más a lo Moby Dick por llamarlo de alguna manera.


Para la primera carrera del año, como no, en Daytona, se inscribieron nada más y nada menos que 93 coches, 42 de ellos Porsche, entre los que había de todos colores y modelos, como este 914 con alerón de 935.






Del que por supuesto hay miniatura.




Y poca broma con el 914, que acabó quinto!!. 15 eran los 935 inscritos, entre los que destacaba el nuevo K3 de Danny Ongais.






De Europa llegó un "J", que era la evolución que Joest había realizado sobre este 77A.






Y que tenía esta pinta.






Peter siguió evolucionando su 935 79', junto Hurley Haywood, esta vez se les unió Bruce Leven.





El Brumos clasificó en 4ª posición por detrás de dos K3 y el Joest, que pronto se vio que eran más rápidos que el de Jacksonville, pero en una carrera a 24 horas, todo puede pasar, y mas si de noche es Haywood quien conduce, mientras descanse Peter.






Pero esta vez no hubo suerte, un fallo en un tuerca mal fijada, les privó de toda opción final.





La victoria fue para el Joest.







Los Alemanes Reinolt Jost, Rolf Stommelen y Volkert Merl.







Le daban la 9ª victoria a Porsche en Daytona.





Y aquí tenemos al pequeño Joest.







Durante el resto de la temporada siguió la misma tónica, el Brumos no podía seguir el ritmo de los mejor evolucionados K3.






No sin plantar batalla por supuesto.







En River Side, Peter hace pareja con Al Holbert, en unas líneas vemos el porqué de esta curiosa alianza.






Mientras que Peter Hurley hace pareja con Leven con el Brumos.






Gregg solo logró subirse tres veces al cajón, siendo un  2º puesto en Laguna Seca su mejor resultado.







En junio cruzó el charco hacia el viejo continente para participar en las 24 Horas de Le Mans, junto a AL Holbert como pilotos oficiales de Porsche.





Porsche en 1980 no siguió con la evolución del 936, ni compitio como equipo oficial en el Campeonato del Mundo, pero sí que acudió a Le Mans, aunque fue una operación más comercial que deportiva, ya que decide acudir con un 924 Carrera GT.






Con una clara idea de aumentar las ventas de su modelo de acceso a la marca, prepara tres unidades, una por cada país donde más ventas y repercusión tiene.





Por Inglaterra, Andy Rouse y Tony Drom pilotaron el dorsal nº 2.






Recientemente se recuperó el coche, al que vemos junto a los Ingleses.






Al que los chicos del Museo le han metido mano, para dejarlo mejor que hace 40 años.






El dorsal nº3 fue para los Estado Unidos de América, y sus pilotos serían Peter y Al Holbert, al ser los principales distribuidores de la marca en USA, de ahí que entrenaran un poco juntos en River Side unas semanas antes. 






Peter Gregg se dirigía hacia Le Mans en coche para la primera sesión de entrenamientos, cuando al entrar en una curva se encontró con un carro de bueyes, al intentar esquivarlo chocó de frente contra otro automóvil, Peter que viajaba con su amigo Frank Stella, sufrió una fuerte contusión en la cabeza, que le provocó una conmoción cerebral,  impidiéndole participar en la Carrera, fue sustituido por Derek Bell.






Al 924 Americano no ha habido que restaurarlo ya que se conserva perfectamente, la otra unidad fue para Alemania, pilotada por Jurgen Barth y Manfred Schurti.




   

No dispongo de ninguna de las miniaturas, aunque Spark reproduce el trio.






Años más tarde Brumos preparó dos 924 en honor a Peter.  












De vuelta a casa sin aparentes secuelas del accidente, Peter corre las 250 Millas de Paul Revere junto Hurley Haywood, pero este se encuentra indispuesto cuando eran líderes y Peter tiene que afrontar solo casi toda la prueba, Peter comienza a tener problemas de cansancio, que le hacen ir perdiendo posiciones, para finalmente acabar en 3ª posición, ya sin ninguna opción al título, que sería para John Fitzpatrick en el 80.





En Mosport comienza a tener problemas de visión y no logra ni clasificarse. La última carrera del año se celebra en Daytona, el 30 de noviembre de 1980.





Y Peter no logra tampoco clasificarse.





No solo eso, la IMSA al ver que tiene problemas para mantenerse en pista, le hace pasar una revisión médica,  la conmoción cerebral sufrida en Le Mans le ha producido lesiones que le afectan al sistema nervioso, que le provocan una distrofia muscular y sufre una aguda doble visión, lo que la obliga a retirarle la licencia.


Peter que se había separado hacía unos años de su primera mujer Jennifer Johnson.





Se casa de repente con una joven y prometedora piloto que había conocido apenas unos meses antes, Deborah Mars.





Apenas una semana después de la boda, el 15 de diciembre de 1980, Peter Gregg es encontrado sin vida en el interior de su 911, junto a la playa de Ponte Vedra en Jacksonville, se ha pegado un tiro en la cabeza, tenía 40 años de edad.,





En el asiento del pasajero se encuentro un maletín con el testamento y una nota manuscrita que decía entre otras cosas:


"Simplemente ya no disfruto de la vida, debo de tener derecho a terminarla, no quiero vivir con este sufrimiento, alejado de lo que más me gusta, acabaría volviéndome loco" 



"Peter Perfect" no pudo soportar dejar de buscar la perfección, con 40 años sigue siendo el piloto IMSA con más victorias, participó en 340 carreras, ganando 152, y 8 campeonatos nacionales.
















Pero la muerte de Peter no significó la desaparición de Brumos ni mucho menos, en el testamento dejó "perfectamente" detallado el plan de negocio para la empresa.


Dejó una fortuna de 18 millones de dólares a Deborah y a sus dos hijos, fruto de su primer matrimonio con Jennifer Johnson, Jason y Simón.  Deja el poder ejecutivo y las riendas del negocio al que era su Gerente en Brumos, Bob Snodgrass (gorra Good Year) 





Quien dirijira la compañía hasta su muerte.






Y como director deportivo del Team Brumos nombra a su amigo Hurley Haywood.







Continuará. 

Saludos

4 comentarios:

  1. Terrible final de Peter, no merecia acabar sus dias asi

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  2. qué feo terminar tanta trayectoria con un tiro.
    también me sorprende que a la primera esposa no le dejó nada (o leí mal?)

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  3. Gracias por leerme Gaucho, desconozco los detalles de la herencia pero la primera mujer de Peter tenia bastante dinero herencia ya de familia.

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