En 1977 Porsche presenta en el Salón Internacional de Ginebra la version carreras cliente de su 911 para correr en el grupo 5 de la FIA, el 935.
Un modelo basado en los prototipos con los que la fabrica había competido en 1976.
Porsche quería dar un arma a sus corsarios para que compitieran al mas alto nivel defendiendo los colores de la marca.
Aunque no en igualdad de condiciones con su equipo de fabrica ya que estos lo harían con una nueva version digamos que un pelín mas evolucionada.
La historia de los 935 "oficiales" ya la hemos contado en varias entradas del blog así que hoy vamos a centrarnos en las de esos corsarios y especialmente en la que decidieron hacer dos hermanos para luchar de tu a tu con el equipo de fabrica.
Hablar de los Kremer es meterse en un jardín considerable, si los hermanos Almeras se dedicaron a preparar los coches de Stuttgart para competir en las carreteras a las que Porsche no las hacia demasiado caso, fueron los hermanos Kremer quienes decidieron plantarles cara en su mismo terreno de guerra, el de los circuitos, y vaya si lo hicieron.
La historia de los Kremer comienza en 1962 cuando Erwin y Manfred montan un pequeño taller de reparación de vehículos en su ciudad natal de Colonia.
Y el día que les llega un 356 muy siniestrado al que deciden recuperarlo y prepararlo para competir a los mandos de Erwin.
El negocio prospera y se especializan únicamente en los coches de Stuttgart.
Erwin no tiene malas manos y va aumentando sus participaciones en los circuitos dando a conocer al taller mientras que Manfred se centra mas el la dirección del negocio, crean la escudería Kremer Racing que con la llegada del 911 les abre otra dimensión ya que la capacidad de desarrollo que ofrece el nuevo coche deportivo de Porsche es mucho mas grande, en 1968 junto a dos clientes y amigos Willi Kauhsen y Helmut Kelleners participan en las 24 Horas de Spa con un 911 L que preparan especialmente para la ocasión.
Y las ganan!
Ese mismo año ganan cinco carreras del Campeonato Europeo de resistencia y el titulo se les escapa por un suspiro, el negocio sigue aumentando y el numero de clientes que quieren que preparen y mantengan sus Porsche crece a la par que la repercusión de sus victorias.
En 1970 Ferry Porsche crea la "Copa" Porsche que en su inicios no es como la conocemos hoy en día, en esas primeros ediciones consistía en premiar económicamente a aquellos pilotos que conseguían los mejores resultados con coches de la marca en las diferentes carreras y campeonatos que se disputaban en Europa, los premios eran bastante importantes económicamente algo que fomento la participación y por la tanto la venta y preparación de los coches de Stuttgart que era el objetivo de Ferry, creándose alrededor de la marca una industria paralela que los Kremer supieron aprovechar como pocos. Y así se mantuvo la Copa Porsche hasta 1986 en la que ya tuvo un calendario propio convirtiéndose en un campeonato mono marca tal y como la conocemos hoy en día. Le Mans era lógicamente la carrera que mas puntuaba en esos primeros años, y los hermanos Kremer deciden preparar un coche e inscribirse en la que seria su primera participación en la carrera de las carreras en 1970.
Erwin seria pareja de Nicolas Koob uno de sus clientes, fijaros como en ese mismo año aparece por primera vez el nombre de Kremer junto al de Porsche en las famosas bandas laterales de los 911.
Porsche alineo nada mas ni nada menos que a 27 coches de su marca en esa edición, que recordemos que fue en la que alcanzo por primera vez en su historia la victoria absoluta con el 917 "austriaco" de los Piech.
Y "once" fueron curiosamente los 911 que se inscribieron en esa edición todos ellos privados, acabando únicamente solo uno de ellos os imagináis cual fue? El nº 47 rojo y no precisamente el autobús de Torre Baro sino el de los hermanos Kremer.
Y no solo se conformaron con acabarla sino que lo harían dentro del top ten finalizando en una magnifica 7ª posición en la general y ganando la categoría de GT 2.5
Si queréis una replica a 1/1 esta esta a la venta por 200.000 euros y digo replica porque no es un Kremer de verdad. https://www.racecarsdirect.com/Advert/Details/145062/porsche-911-24-st-1971
La victoria en Le Mans siendo el primer 911 aun les dio mas volada a los Kremer, que aumentan el numero de preparaciones con maravillas como este 911 S psicodélico.
Por cierto Kremer ganaría la Copa Porsche 11 veces con sus coches. En el 73 Copa Porsche incluida Kremer se hacen con el Campeonato de Europa de Gran Turismo de la mano del piloto alemán Clemens Schickntank que lo logra con varios 911 preparados por los Kremer, uno de ellos es un RS con el que corre junto a Erwin y Paul Kellers las 24 Horas de Le Mans de ese año, fijaros como en la banda de lateral ya figura solo el nombre de "Kremer".
Y aquí junto a su hermano mayor.
Los Kremer ya comienza a soplarle la oreja a los Porsche oficiales y lejos de molestar a la fabrica mas bien todo lo contrario en 1974 se convierten en concesionario oficial de la marca en Colonia y abren unas nuevas instalaciones mucho mas grandes.
En las que en empiezan a vender y a preparar la nueva arma de los de Stuttgart el RSR 3.0
Para el que crean un kit "Kremer".
En 1976 entra en escena nuestro protagonista de hoy el Porsche 935 modelo en el que los Kremer jugarían un papel importantísimo, en 1976 Porsche fabrica dos prototipos del 935 basados en los 934 RSR para participar en la nueva categoría creada por la FIA del Grupo 5 que daba libertad para modificar y optimizar al máximo un coche de serie, de ahí y que ya hemos comentado muchas veces es de donde viene la denominación de 935 al Porsche. 9 (911) 3 (930 Turbo) y 5 del Grupo 5 Fia.
Miniatura que también esta en caza y captura.
Aquí tenemos a los padres junto a la criatura.
La producción del 935 en 1978 es de 17 unidades y esta vez los Kremer son agraciados con tres de ellas, el primero es el chasis 930 890 012 con el que participaran en Le Mans.
No lograría nada destacable esa temporada y acabaría años mas tarde en el equipo Joest, el segundo chasis de fabrica que obtuvo Kremer fue el 930 890 013 y con el que se centrarían en la obtención del Campeonato GT alemán de la mano de Bob Wollek con los mismos colores verdes y Vaillant como patrocinador para ganar el campeonato de nuevo.
Y ganarían también como no de nuevo la Copa Porsche.
Y aquí tenemos la miniatura de uno de esos 935 de fabrica que pertenecieron a los Kremer.
Como podéis observar es muy parecido al K2 que hicieron los Kremer. El ultimo chasis 78 de fabrica que logran los Kremer es el 930 890 022 al que aquí tenemos peleándose con otro unidad corsaria, el coche no lograría nada destacable.
Y con esto llegamos a la temporada clave de 1979, Porsche solo fabrica 7 unidades mas del 935 y son todas para el mercado americano, es entonces cuando deciden con la experiencia adquirida con sus dos prototipos y los mejoras que han realizado a los de fabrica crear otro 935 propio ya no solo para competir con el sino que también para ponerlo a la venta, no hay que pensar demasiado como lo denominaron.
Es el Porsche 935 K3.
No voy a entrar en demasiados detalles técnicos pero así muy por encima el coche se diferenciaba de un 935 de fabrica en mas de 100 aspectos, una reducción de peso de 30 kilos en el que el cambio del sistema de refrigeración tuvo bastante que ver al sustituir el intecooler de agua por uno solo de aire, toda la fibra de vidrio que se pudo, un anclaje del motor mucho mas sencillo de montar y desmontar y que bajaba algún grado el centro de gravedad y sobre todo unos ajustes del motor que le llevaban casi a los 800 cv que lo ponían de salida por delante de las prestaciones de los de fabrica. Porsche llego a decir para rebajar las expectativas que solo se trataba de un 935 mas al que como mucho podían haber mejorado apenas un 1% en sus prestaciones a costa de su fiabilidad.
Cuatro unidades fueron las que fabricaron en 1979, su debut fue en la primera prueba del campeonato alemán de GT en Zolder.
La numeración del chasis era Kremer 009 0002 y el piloto Klaus Ludwig.
Ganaron la carrera.
Miniatura disponible y que tengo en posesión aunque con los colores que lucio en 1980 y ya en manos privadas.
Este chasis ganaría en su categoría de Grupo 5 la 24 hora de Le Mans en 1982.
Y en la actualidad se conserva con esta librea.
El siguiente K3 que fabricaron fue el chasis 009 0003 y fue el primero que vendieron, los agraciados fueron el equipo del fabricante alemán de herramientas Weralit Elora Racing Team.
No seria el único K3 que tendría Bob, esta unidad se le vendió a Bob Garretson quien en 1981 logro un 2º puesto en las 12 Horas de Sebring de 1981.
Y así es como se conserva hoy en día en manos de un francés.
El cuarto K3 que fabricaron los hermanos Kremer en 1979 fue a la postre el mas famoso y que alcanzaría la gloria del automovilismo por los siglos de los siglos, fue el nº de chasis 0009 0015 y se merece una entrada propia al ganar las 24 Horas de Le Mans en 1979, por lo que tampoco entraremos en muchos detalles de la gesta de sobras conocida, pero si que os hablare mas en profundidad sobre la otra pareja de hermanos a los que perteneció este 935 K3, los hermanos Whittington al los que vemos charlar junto al gran Paul Newman, y por si hay algún despistado que piensa que pinta Paul Newman por aquí que se lea esta entrada.
https://misporschesaescala.blogspot.com/2018/01/paul-newman.html
Hablar de estos "bad boys" mas que meterse en un jardín es meterse en un charco. Hijos de un piloto de avionetas que tenia una pequeña empresa de alquiler y mantenimiento de avionetas, crecieron entre coches y aviones compitiendo de muy pequeños tanto por tierra y aire, con los años heredaron el negocio y de la noche a la mañana como aquel que dice crearon una escudería con la que comenzaron a destacar en el panorama automovilístico americano.
En 1978 sorprendentemente se hacen con varios 935 con los que participan en el IMSA americano.
El dinero no parecía serles un problema y eran capaces de comprar asientos hasta en la Indy.
Ese mismo año de 1978 participan en las 24 Horas de Le Mans donde conocen a los Kremer, para la edición de 1979 deciden querer correrlas con uno de esos K3 y como no hay ninguno a la venta y con dinero de por medio convencen a sus tocayos alemanes para que les ceda dos asientos en uno de los dos K3 que los Kremer tienen previsto llevar al circuito de La Sarthe, y como casi todo tiene un precio en esta vida a cambio de 20.000$ por cabeza logran convencer a los Krmer para que les de un asiento en el Kremer Racing, pilotaran un K3 harán junto al piloto de la casa Klaus Ludwig.
El experimentado piloto alemán clasifico al K3 en la 3ª posición de la parilla solamente por detrás de los todo poderosos Porsche 936 oficiales de fabrica.
El coche de Ludwig y los Whittington lucia el dorsal nº41 y estaba patrocinado por el diseñador francés Phillipe Salvet y la revista de modas Reserve.
Pocas horas antes de las tres de la tarde del 9 de junio de 1979 hora de comienzo de la carrera, los hermanos Kremer establecen las estrategias de los dos coches que tendrán en pista, la otra unidad es un 935 de fabrica a los que los Kremer le han montado su kit K3 que han fabricado y que pondrán a la venta de cara a la temporada siguiente para actualizar los 935 de fabrica a su version K3, esta es la única foto que he localizado con los dos Kremer juntos.
La miniatura si que esta disponible.
El caso es que Manfred Kremer establece lógicamente que la salida la hará Ludwig seguido de los hermanos Whittington en el orden que ellos elijan, algo que no les gusta a los americanos alegando que con la pasta que han pagado no quieren arriesgarse a que el alemán sufra un accidente o rompa el coche a las primeras de cambio y estos se queden sin correr, lo hermanos Kremer les dicen en una conversación que de haberse grabado seguro que hubiera dado para algún guion cinematográfico que es su coche y sus normas y que eso es lo que hay, ante la insistencia y para zanjar el tema Manfred les suelta que si quieren salir primero que les compren el coche con el consiguiente "di una cifra", un 930 valía unos 30.000$ y desconozco costaba un 935 de fabrica ni por lo que estaban vendiendo sus K3, el caso es que los Kremer para zanjar el tema y recordar que estaba a punto de dar comienzo la carrera les dijeron 200.000$ y los Wittington se marcharon, la cara de los Kremer debió ser digna de ver cuando minutos antes de comenzar la carrera Don Whittington se presenta en el box de los Kremer con cuatro bolsas de lona azul con 200.000$ en metálico y suelta un "aquí los tenéis el coche es nuestro y yo conduzco primero".
El resto del guion ya es historia.
El K3 se convertía en el primer Porsche de la serie 911 en ganar las 24 Horas de Le Mans en categoría absoluta.
Y aquí tenemos a la miniatura del K3 de los hermanos Kremer mas famoso de la historia.
Ese año de 1979 los 935 hacían un triplete de leyenda con dos Kremer en el podio ya que tras el 935 de Paul Newman entro uno de los 935 de fabrica que tuvieron y que decoraron como su K2.
Esta épica victoria supuso poner en el foco de atención en el mundo automovilístico a las dos parejas de hermanos, en cuanto a los Kremer todo el mundo quería un K3 o al menos uno de los kits para hacerles el upgrade a los 935 de fabrica, y en cuanto a los Whittington todo el mundo se preguntaba como lo habían hecho, además a su regreso a Atlanta junto al K3 no se les ocurrió otra cosa que comprar el circuito de Road Atlanta que poseía la recta mas larga de Estados Unidos y una nueva flota de avionetas para su empresa, y los que también pusieron el foco sobre los hermanos americanos fue la DEA, en 1986 fueron arrastrados acusados de narcotráfico y condenados a pasar una larga temporada a la sombra, el caso es que llevaban años traficando importando droga con sus avionetas y usando hasta el circuito de Road Atlanta como pista de aterrizaje nocturna, su equipo de carreras era una de las principales tapaderas que tenían para blanquear dinero usando como por ejemplo patrocinadores falsos que no existían.
Eso si, su míticos 935 siguen rodando.
En cuanto al K3 comprado por 200.000$ y lo pintaron con sus colores de guerra, aquí podéis ver un reportaje del coche publicado en marzo de 1980.
El coche tras pasar por varias manos fue restaurado por Canepa Racing hace unos cuantos años a su configuración de Le Mans como es lógico.
En la actualidad pertenece al multimillonario y propietario de una de las mayores colecciones privadas de coches Bruce Meyer.
Hace unos años Bruce Meyer se encontraba rodando precisamente en Road Atlanta en un track day con el K3 cuando de repente apareció la DEA.
Con una orden de embargo por todos los bienes y propiedades de los Whittington por otro juicio pendiente.
Ante la incredulidad de Meyer que no entendía nada y era incapaz de hacerles entender a los agentes que el coche no tenia nada que ver desde hacia años con los Whittington estos lo subieron a una grúa y se lo llevaron.
Hasta que sonó por los altavoces del circuito el Inocente Inocente y la grúa se dio media vuelta!. Ya os digo de guion de película.
Pero volvamos a los Kremer, en 1980 fabricaron 10 unidades mas del K3 pero también se inflaron a vender kits "K3" que se montaban sobre los de fabrica y que no hay que confundir con los K3 pata negra que fabricaron, veamos un ejemplo.
El gentleman Porsche japonés Tetsu Ikuzawa.
Presencio en directo la hazaña del K3 al participar en Le Mans ese mismo año con un Mazda con un curioso look "K" como si lo hubieran pedido por Alexpress.
Desconozco si también pertenecía al mismo gremio que los Whittington que entiendo que no porque en la actualidad sigue rodando con sus Porsche, brutal esa combinación de color del 911.
Y se hace con un 934 76' con el que había corrido el equipo alemán Egon Evertz, concretamente era el chasis 930 670 0163.
Y se lo lleva a los hermanos Kremer para que lo conviertan en un K3 con uno de sus kits y lo preparen para correr las 24 Horas de Le Mans del año siguiente haciendo una joint venture con ellos con la intención de repetir la hazaña, el coche lucio estos colores.
Y la verdad es que la cosa no pintaba nada mal.
Si el K3 pata negra del 79 clasifico en 3ª posición en la parrilla de salida el coche que habían preparado los Kremer con el japonés también lograba la misma posición de salida en 1980, en una edición en la que había 10 Porsches con las siglas K3 inscritos, uno de ellos como no el ganador de los hermanos narcos ya con sus colores amarillos de guerra y los que a golpe de talonario habían contratado como tercer piloto a nuestro gran amigo Hurley Haywood.
El que aparece junto al coche a no ser que en esa edición se hubiera zampado un par de terneras no es Hurley creo que es uno de los Whittington con permanente para despistar a la DEA.
En carrera el Gozzy Kremer Racing que tenia aparte del japonés a Rolf Stommelen y Axel Plankenhorn como pilotos.
En una edición muy pasada por agua.
Y aquí tenemos a su miniatura.
Por contra vayamos con uno de los que si que eran K3 "pata negra" cosecha del 80 y que en principio era el protagonista de hoy, el chasis 000 0009 que les encargo de Dick Barbour a los Kremer y pensado específicamente para el IMSA americano, el coche debuto en las 24 Horas de Daytona de 1980.
No acabarían la carrera por una avería.
Carrera que por cierto gano otro 935 con otra letra detrás y que no era la K sino la J.
La estela de los Kremer la siguieron algunos mas aunque en tiradas muy limitadas como Joest que sobre el chasis 930 890 0014 también hizo su version del 935 y con éxito.
La siguiente prueba del IMSA si que la acabaría nuestro K3.
Las siempre alocadas 12 Horas de Sebring.
Y que serian para Dick Barbour junto a John Fitzpatrick.
Y aquí tenemos a la miniatura causante de esta entrada.
Aquí lo vemos en su version 81 en Le Mans con miniatura disponible.
Tras pasar por varias manos el coche reapareció totalmente restaurado a sus colores de Sebring en el festival de Monterey de 2015.
La gran mayoría de los K3 se fueron para Estados Unidos, en Europa se tiro mas de kit, uno de los que los Kremer fabricaron para cruzar el charco fue el chasis 000 0018 y fue un encargo bastante especial del ex piloto canadiense de Formula 1 Walter Wolf, la petición era que se pudiera matricular, algo que la propia Porsche ya había realizado para el magnate y dueño del TAG Heur Mansor Ojjeh.
Pero como Wolf tenia bastantes mejores manos que el millonario quiso un K3 a imagen y semejanza del ganador en Le Mans y al igual que la fabrica si había dinero de por medio los Kremer se lo hicieron.
Y que a menudo se confunden ya que corrían indistintamente con los dorsales 0 y 00, inicialmente los 00 eran los 935 77 de fabrica con el kit K3 y los 0 los K3 80, aunque el mas famoso es el 00 de fabrica que gano las 24 Horas de Daytona del 79.
000 00011. Este chasis se quedo en casa y lucio unos colores míticos en el DRM alemán.
Otra unidad que se conserva como recién salida de la destilería, cosas del alcohol.
000 00013. El 13 corrió inicialmente con el Kremer Racing y partió posteriormente para Estados Unidos adquirido por el bueno de Bob Akin convirtiéndolo en otro de sus famosos Coca Colas.
000 00025. Este chasis no llego a competir nunca fue para John Paul que ya había desarrollado sus propios 935 sobre los de fabrica, en 1982 el JLP2, daría el golpe llevándose las 24 Horas de Daytona, con su anterior 935 JLP ya logro anteriormente un 2º puesto.
Tras ganar en Europa la Porsche Cup los Kremer lo vendieron a John Fitzpatrick con el que conseguiría cinco victorias en el IMSA del 82.